La Casa-Museo Antonio Padrón de Gáldar enriquece las visitas escolares de febrero con el taller ‘Máscaras sobre Jareas’
La actividad se enmarca en el mes del Carnaval y se dirige a estudiantes de Educación Primaria y Secundaria
Las Palmas de Gran Canaria, 26 de enero de 2024.- La Casa-Museo Antonio Padrón-Centro de Arte Indigenista de Gáldar recupera una actividad escolar tradicional durante el mes de Carnaval. Se trata del taller ‘Máscaras sobre Jareas’, acción especialmente diseñada para la participación de centros escolares de Primaria y Secundaria, coincidiendo con la época del Carnaval y en horario lectivo. Los centros interesados puede ampliar la información con un correo electrónico a la dirección cmapadron_deac@grancanaria.com.
Es una visita-taller diseñada para conocer la importancia de la máscara en la inspiración de los artistas, en la cultura africana y la influencia de las mismas en la obra de Padrón. Con una recorrido por las salas del museo y algunas explicaciones sencillas, los escolares pueden aprender las relaciones entre diferentes expresiones culturales que se esconden tras sus diferentes usos para terminar siendo capaz de crear una máscara propia, adjudicándole algún tipo de significado simbólico.
Tras explicar el uso de máscaras por parte de las tribus africanas, la experiencia continúa con la posibilidad de elaborar sugerentes máscaras carnavaleras, que reproducirán la forma de las jareas secas. Sobre una cartulina impresa, los niños y niñas dejarán volar su imaginación para construir una máscara según sus preferencias, inspirándose en la utilización que hacen de ellas las tribus africanas.
Este elemento tan característico del mundo marinero en Canarias aparece también de forma recurrente en algunas de las obras más significativas del pintor galdense Antonio Padrón, sobre todo en las correspondientes al último periodo de su producción plástica. De hecho, el artista tiene varios cuadros en los que la jarea constituye un elemento expresivo de capital importancia, como su pieza titulada ‘Bodegón con jareas’, correspondiente a su última etapa productiva. En él se muestra el singular proceso de secado del pescado, un componente ligado al régimen alimenticio popular de los canarios. Ya fuera en su labor de preparación, en la cena o en el mostrador del mercado, la jarea se apropió repetidas veces de muchos de los cuadros de Padrón. Su simplicidad compositiva y geométrica atraía al artista. Alrededor de este elemento se desarrolla esta acción educativa.
Máscaras en la cultura africana
Las máscaras africanas auténticas no son trozos de madera más o menos decorativos, sino símbolos religiosos con una función reguladora en la vida del poblado. Generalmente se utilizan en ritos agrarios, funerarios, festivos e iniciáticos, en los que cada miembro varón del poblado debe participar para ser admitido en la comunidad con pleno derecho. En los ritos funerarios, la máscara capta la fuerza vital que se escapa de un ser cuando muere. La máscara controla esa fuerza vital, evita que dañe a la colectividad y la distribuye en beneficio de todos. En el momento del baile, la máscara protege al que la porta, y le convierte durante ese tiempo en otro ser. El portador de la máscara debe ir vestido de forma que no se le reconozca.
Las relaciones cada vez más estrechas de Europa con las colonias africanas despertaron el interés por sus expresiones culturales. A comienzos de la década de 1900 la estética de estas máscaras africanas llego a ejercer una poderosa influencia en la obra de los artistas europeos. Rasgos simplificados, planos, ojos de cuencas vacías despersonalizan el rostro humano en movimientos como el cubismo, dadaísmo o el expresionismo. La máscara deja de mostrarse como objeto y termina por asimilarse al propio rostro, cuestionando la identidad, la individualidad y la subjetividad. En algunas obras de Padrón podemos apreciar todos estos rasgos que deforman el rostro y nos ayudan a comprender la emoción que quiere trasmitir el artista.